jueves, 9 de julio de 2020

TREINTA Y CINCO

No recuerdo de dónde saqué un compilado del sello Mute en el viaje a Brasil del que hablaba en el capítulo anterior. Era un casete. Quizás venía con alguna revista que compré. No lo sé. Sin embargo, lo que sí sé es que además de los artistas obvios del sello (Depeche Mode, Erasure), incluía una canción de Nick Cave and the Bad Seeds que estaba en “The Good Son”, que como lo había comprado en CD antes de mi viaje no me sorprendió. Sin embargo, también incluía la canción “I Have The Gun” de Crime & The City Solution, grupo del que hasta ese momento solo había escuchado “Six Bells Chime” en la película “Las alas del deseo”. Vaya sorpresa: era un temazo. No podía dejar de escucharlo. Por suerte, un tiempo después, cuando empecé a frecuentar el Parque Rivadavia, los domingos por la mañana, conseguí “Paradise Discotheque”, el primer disco del grupo que pude escuchar completo. Es un disco IM-PRE-SIO-NAN-TE que aún hoy disfruto muchísimo. También en el parque, conseguí el disco anterior de la banda, “The Bride Ship”, que, si mal no recuerdo, se lo compré a la misma persona. Lamentablemente, este álbum no me parece tan genial como el otro, aunque lo valoro por sentirlo como un esfuerzo previo gracias al cual el grupo pudo encontrar la veta para crear su obra maestra. Si lo escuchamos bien, es un disco que anticipa lo que finalmente lograron concretar en ese último disco de la clásica era de Berlin.


No hay comentarios:

Publicar un comentario